Colombia Universal / Boyacá 7 Días
TUNJA Boyacá. — La medida, que busca erradicar unas cinco mil hectáreas del narcótico, beneficiará a cuatro mil familias del occidente del departamento. En el proyecto participarán los municipios de Buenavista, Briceño, Pauna, Maripí, Muzo, Coper, Tununguá, San Pablo de Borbur, Otanche, Quípama y Puerto Boyacá.
La iniciativa pretende que, a cambio de esos plantíos ilegales se siembren en un año, en la región, unas 500 hectáreas de café orgánico y otras 200 con heliconias y flores exóticas. Según José Ruperto Ríos, director de Agricultura de Boyacá, la primera etapa del proyecto cuesta 300 millones de pesos, y arrancará en el próximo mes de junio.
¿Cómo funciona?
Los alcaldes serán los encargados de convocar a los agricultores, que deben estar reunidos en asociaciones. De lo contrario, no podrán acceder al proyecto. En cada uno de los municipios se crearán centros de capacitación (de una hectárea), donde se enseñarán las técnicas de cultivo, y que serán el centro de operaciones. Allí también se establecerán viveros.
A cada asociación vinculada se le otorgará de manera gratuita las semillas y plántulas tanto de heliconias como de café, al igual que de productos como plátano y cítricos que cumplirán labores de protección y sombra a esos plantíos. En el caso del café, tendrá que ser cultivado y procesado bajo buenas prácticas agropecuarias. Es decir, que crezcan libres de químicos con miras a comercializarlos como un producto totalmente natural.
Después de la etapa productiva vendrá la comercialización, que ya está garantizada en mercados de Bogotá y el exterior. Así que los agricultores no tendrán que preocuparse a la hora de vender sus productos. Durante todo el proyecto, los vinculados tendrán asistencia técnica especializada permanente por parte de la Secretaría de Agricultura y las Umatas de los municipios.
La propuesta
La presentación del proyecto se llevó a cabo a finales del pasado mes de abril en Chiquinquirá. Los mandatarios locales de la provincia de Occidente manifestaron su interés en el tema, pero exigieron que se ejecute con transparencia, efectividad y seguimiento.
Javier Rodríguez, alcalde de Coper, apoya la iniciativa. Sin embargo, considera que es muy pequeña ante la magnitud del problema (cultivos de coca) y las necesidades de la poblacíón. También espera que no suceda lo mismo que con el proyecto cacaotero, que tenía las mismas pretensiones y que terminó siendo, según él, un fiasco.
TUNJA Boyacá. — La medida, que busca erradicar unas cinco mil hectáreas del narcótico, beneficiará a cuatro mil familias del occidente del departamento. En el proyecto participarán los municipios de Buenavista, Briceño, Pauna, Maripí, Muzo, Coper, Tununguá, San Pablo de Borbur, Otanche, Quípama y Puerto Boyacá.
La iniciativa pretende que, a cambio de esos plantíos ilegales se siembren en un año, en la región, unas 500 hectáreas de café orgánico y otras 200 con heliconias y flores exóticas. Según José Ruperto Ríos, director de Agricultura de Boyacá, la primera etapa del proyecto cuesta 300 millones de pesos, y arrancará en el próximo mes de junio.
¿Cómo funciona?
Los alcaldes serán los encargados de convocar a los agricultores, que deben estar reunidos en asociaciones. De lo contrario, no podrán acceder al proyecto. En cada uno de los municipios se crearán centros de capacitación (de una hectárea), donde se enseñarán las técnicas de cultivo, y que serán el centro de operaciones. Allí también se establecerán viveros.
A cada asociación vinculada se le otorgará de manera gratuita las semillas y plántulas tanto de heliconias como de café, al igual que de productos como plátano y cítricos que cumplirán labores de protección y sombra a esos plantíos. En el caso del café, tendrá que ser cultivado y procesado bajo buenas prácticas agropecuarias. Es decir, que crezcan libres de químicos con miras a comercializarlos como un producto totalmente natural.
Después de la etapa productiva vendrá la comercialización, que ya está garantizada en mercados de Bogotá y el exterior. Así que los agricultores no tendrán que preocuparse a la hora de vender sus productos. Durante todo el proyecto, los vinculados tendrán asistencia técnica especializada permanente por parte de la Secretaría de Agricultura y las Umatas de los municipios.
La propuesta
La presentación del proyecto se llevó a cabo a finales del pasado mes de abril en Chiquinquirá. Los mandatarios locales de la provincia de Occidente manifestaron su interés en el tema, pero exigieron que se ejecute con transparencia, efectividad y seguimiento.
Javier Rodríguez, alcalde de Coper, apoya la iniciativa. Sin embargo, considera que es muy pequeña ante la magnitud del problema (cultivos de coca) y las necesidades de la poblacíón. También espera que no suceda lo mismo que con el proyecto cacaotero, que tenía las mismas pretensiones y que terminó siendo, según él, un fiasco.