R. G..A Coruña
Café de Chiapas (México), cacao de Bolivia, pastas con azúcar de Costa Rica y miel de Chile, artesanía y bisutería asiática… La plaza de María Pita vivió ayer un mercado exótico y con compromiso. La ONG Solidariedade Internacional de Galicia organizó ayer su octava fiesta de Comercio Justo.
El dinero recaudado se destinará a una buena causa: “Tratar de reducir la pobreza con el apoyo a pequeños productores que no tienen acceso a los mercados de los países del norte”, explicaron los organizadores.
Un ejemplo de comercio justo es la Tagera Cooperative Union (KCU), una organización dedicada a la producción de café que se creó para competir en igualdad de condiciones con las multinacionales asentadas en Tanzania. “Gracias al comercio justo obtienen dos euros por un kilo de café, frente a los 73 céntimos que les pagaban en el mercado tradicional”, recuerdan desde Solidariedade Internacional de Galicia.
Durante todo el día, las personas que se acercaron hasta la carpa ubicada en María Pita pudieron comprobar manjares elaborados por la Escuela de Hostelería San Javier: tarta de piña o de chocolate, que se acabó nada más ponerla sobre la mesa. Pero los curiosos también pudieron comprar productos de artesanía y alimentación procedentes de una veintena de cooperativas y organizaciones de diferentes puntos de América Latina, África y Oriente Próximo.
Cacao puro e instantáneo de Bolivia, azúcar de Ecuador, collares del Nepal, el Guaranito (un refresco sin gas), la Cola 3 (alternativa a una conocida bebida) y el ron de Cuba, que tuvo ayer gran aceptación entre los coruñeses. Todos estos productos también se pueden encontrar en la tienda que la ONG tiene en la calle Cordelería.
Los voluntarios de Solidariedade Internacional hicieron pasar un buen rato a los más pequeños con juegos cooperativos, actividades como globoflexia o pintándoles la cara. El mago Román y la actuación musical de Alba López contribuyeron a amenizar la fiesta